Lo se Susana y Mazinger fue amor a primera vista. Ella le protegió de todos los borrachos.
Ah, las New Balance que luzco graciosamente en la foto también fueron un regalo. Haría recuento de ellos si no fuera una vulgaridad solo digna de fisicos o químicos: las susodichas zapatillas, una estupenda orquidea, la noche de hotel, una impresora láser, dvds varios, cds varios, libros varios, muchas camisetas, una camisa, un pantalón corto chulísimo...
Fue como la noche de reyes, pero sin la llegada de los reyes, solo de 6 policías. ¿Seis? ¿Pero realmente qué se pensaban encontrar? Ah, Mazinger salió a saludarlos, para romper la tensión del momento. Eso sí, como los 6 estaban metidos en su papel, ni uno solo lo acarició. Malditos.