..y tú estás en Londres. Y cuando llegues yo me iré a Nueva York. Con esto Mecano haría una canción.
El final del verano llegó y el jaleo de las terrazas, la alegría de los que tomaban cañas, la odiosa trompeta y el odioso acordeón que se colaban por mis ventanas de climalit, dejan paso a los llantos de los niños en su primer día de colegio. Hoy a las 11 de la mañana he visto como una abuela arrastraba literalmente a una niña de unos cuatro años que parecía que la estuvieran llevando al paredón. Qué chillidos, pobre.
Y esta noche volveré a colocar el edredón, porque esta mañana me desperté con frío. Halelujahh!! que cantaría Leonard Cohen.
Y llega el otoño y yo llevo 140 páginas escritas. Y aún no sé muy bien qué saldrá de todo eso.
Y llega el otoño y Fito publica nuevo album y yo lo compro en itunes y aquí estoy pensando en abrigarme mientras lo escucho.
Y llega el otoño, ¿y que me pongo esta noche? que Almodóvar cumple años y en un rato iré a celebrarlo a su fiesta. Bruce Weber, mi admirado Bruce Weber, el que inventó el deseo en blanco y negro, estará sacando fotos. Me tendré que morder las uñas para no comportarme como un fan histérico. ¿Sabré?
Mañana os cuento. Prometo no beber.
No beber demasiado. Que es otoño. Y ya no tengo la coartada del verano.
martes, 15 de septiembre de 2009
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1 comentario:
Carlos, yo estoy un poco triste con este otoño que ha llegado... estos dos días me he negado a aceptar que han bajado las temperaturas... el lunes en bermudas y chanclas que ayer abandoné porque tenía reunión en telecinco... sino una polla... pero hoy, no me queda otra... resignarme y aceptar... que el fin del verano siempre es triste, aunque entre las mantas pueda hablar de amor...
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